Entradas populares

lunes, 16 de mayo de 2016

EN FUTBOL y BEISBOL, LOS PRIMEROS JUGADORES DE LUZ y FUERZA. (I).

ESTUDIOS FOTOGRÁFICOS LyF y SME… ¿QUIÉN ES? ¿QUIÉNES SON?

POR: JOSÉ FRANCISCO COELLO UGALDE.

   En esta evocadora imagen, cuyo registro data de 1919, es posible admirar en interesante composición, al que fue por entonces el equipo de futbol “Club Luz y Fuerza”. Afortunadamente se pueden identificar a todos ellos. De izq. a der.: Andrés López, Manuel Valderrábano, David Arévalo, Felipe Méndez y Miguel Ruiz. En medio: Pánfilo Meléndez, Juan Jiménez y Arnaiz; abajo: Mateo Huarte, Francisco N. y Gabriel Álvarez.

   Es en LUX. La Revista de los Trabajadores, año XXXIX N° 190 de abril de 1970, p. 63 donde se ubica tal testimonio, del que se puede saber un poco más. Por ejemplo, que Miguel Ruiz fue uno de los precursores y fundadores del equipo Necaxa. Por aquel año de 1919 el equipo previo llevó por nombre Luz y Fuerza y a los integrantes del conjunto, a pesar de que prestaban sus servicios en la empresa, ésta no les proporcionaba nada en absoluto, no digamos en útiles, ni siquiera en forma económica, ya que cada quien, de su peculio, sufragaba sus gastos, como apunta Salvador Mendizábal C., autor de las notas. Precisamente el campo donde efectuaban sus entrenamientos y partidos, es donde estuvo uno de los almacenes de la compañía, allá por la colonia de los Doctores.
   Los fundadores del equipo fueron, en aquel entonces, los compañeros Miguel Ruiz, Gabriel Álvarez, Mateo Huarte, Manuel Valderrábano y David Arévalo.
   Hasta el año 1925 fue cuando la Compañía de Luz les dio sus primeros uniformes y cuando surgió el nombre que todos conocemos: Necaxa. Ese primer uniforme ostentó el color gris con franja roja; después hubo cambio de colores que fueron rojo y negro en la camiseta con pantalón negro.

   Cuando la cosa fue en serio, ya que se forjó un compromiso moral con la compañía, los integrantes de este equipo se inscribieron en una liga que se llamaba Liga Excélsior.

No hay comentarios:

Publicar un comentario