POR:
JOSÉ FRANCISCO COELLO UGALDE.
Portada
del N° 18, correspondiente al mes de junio de 1929. El retrato de estudio,
podría corresponder a la actriz estadounidense Louise Brooks (1906-1985).
Varias de sus actuaciones en el cine apostaron por comenzar a trascender el
lesbianismo.
Desde la
portada misma, este número nos muestra una serie de particularidades, siendo
una más de ellas, la que se presenta en la página 5. Se trata de una columna
nueva, sin demasiadas aspiraciones, sólo como para llenar el espacio y que se
llamaba “Mesa Revuelta”. No aportaba nada en especial que no fueran motivos
para el chacoteo y sobre temas de información general, salvo el detalle que nos
da su autor sobre ciertas serpientes boas, llamadas Mazacoatl o la anécdota en la que fue protagonista el célebre
compositor Richard Wagner. No más.
A continuación,
también nos encontramos en “Concursos Luminosos”, la convocatoria abierta para
destacar a las más prominentes figuras de nuestra Patria. No faltaron las
respectivas bases. Del mismo modo, tres interesantes caricaturas, que ilustran
a Felipe Bustos, a Wriel Saldaña y a José Calvillo, firmadas por las iniciales
C y A” entrecruzadas, enriquecen la “Galería de Electricistas prominentes”.
“Temas Sociales” sigue abordando, desde la
opinión de Ignacio Herrera las diversas visiones que entonces se tendrían sobre
aspectos tocantes a la “humana injusticia”, en donde la mujer se convierte en
asunto de sus apuntes. Si desde la “Declaración de los derechos del hombre” la
contemplación sólo era posible para tal género humano, la mujer quedaba
desechada. Por tanto, hacer un esfuerzo por incorporarla, representó desde un
principio un incómodo proceso de asimilación para que el hombre mismo pudiese
considerar a la mujer como parte activa, de igual a igual, y con las mismas
capacidades. Hoy, 2015 al igual que 1929, no está superado tal conflicto, y es
ella quien sigue padeciendo menosprecio, quizá en escalas menos notorias que en
el pasado. Sin embargo, la discriminación impera.
Aparecen los acuerdos tomados en la V
Convención de la Confederación Nacional de Electricistas y Similares, que no
son otra cosas que medidas más pertinentes para las mejoras que pretende tal
agrupación, en términos de capacitación, superar diferencias habidas entre
varias organizaciones, una petición para contar con maquinaria indispensable para
editar un órgano oficial de prensa de la propia Confederación, pero sobre todo
la demanda de que se establezca la Secretaría del Trabajo. Veremos más adelante
si tales propósitos fueron atendidos debidamente.
Una columna firmada por G. Palma: “OPINIONES.
El Cuarto Poder”, analiza la condición que la prensa, entendida como CUARTO
PODER asume en el entramado ya sea como un medio influyente en términos de su
cobertura o de su influencia. Incluso de las condicionantes que los otros
poderes pudiesen tener para poner al servicio a este último en todo aquello
relacionado con sus intereses.
La “Sección Científica” muestra en “El Rayo
Cósmico” las virtudes que José Juan Tablada despliega en su interesante
colaboración, la que escrita unos años atrás, no perdía actualidad en esos
momentos, dados los hechos que se venían desarrollando en torno al
descubrimiento y mejoras respectivas en torno a la presencia de los “Rayos X”.
Llega un momento en que el también autor de reconocidos haikus comparte su
emoción al respecto:
Henos aquí
sumergidos, los míseros mortales, en medio de un torbellino de fuerzas para las
que la materia no existe, puesto que los más densos cuerpos son para ellas
transparentes!
Por lo menos en el terreno del pensamiento
de la abstracción, la exclusa del misterio para desbordarse en cataratas de
aguas negras, arrebatando en naufragio irremediable a la razón desvalida!...
Aniquilada la materia, anonádase con ella el espacio, y deshecho el espacio,
¿cómo definir el tiempo?...
En clara muestra por registrar
acontecimientos que bien pueden ser considerados también como efemérides,
podemos encontrar en NOTAS DE LAS DIVISIONES, los hechos más recientes
ocurridos en tales espacios regionales donde la influencia territorial de la
Compañía Mexicana de Luz y Fuerza Motriz, S.A., así como del Sindicato Mexicano
de Electricistas se deja notar en forma contundente.
Allí está el dato sobre lo ocurrido en
Necaxa el 1° de mayo, donde además de los festejos del día del Trabajo, fue en
tal sitio donde se colocó la primera piedra del que luego sería el edificio
social. Por tanto, esto ocurre el 1° de mayo de 1929, dando constancia del
hecho, la asistencia del Gerente General de las Compañías, Sr. W. H. Fraser,
quien aceptó de muy buena voluntad, demostrando con esto una vez más los buenos
deseos que siempre le animan para con la División Necaxa. Al Sr. Fraser
acompañaron los Sres. G. Guibelini, J. Bernier y H. L´Hoist, así como los
miembros del Sindicato en su totalidad y público en general.
Por
la noche hubo fuegos pirotécnicos, participó el “Quinteto Uribe” y aquello
remató con dos grandes bailes, uno en el Salón de Sesiones y otro en la Colonia
Juárez, “predominando principalmente familiares del elemento trabajador, los
que entre la más franca confraternidad se divirtieron hasta las primeras horas
de la mañana del día 2 de mayo”, termina diciendo la nota.
El recuento de “Armando Raspa” en “Sincronizando
O.K.” no tiene desperdicio, pues nos cuenta en su estilo coloquial una anécdota
ocurrida a “don Chón”, patriarca de las “línias agrias”, enfrentando a los
zapatistas cuando integrantes de dicho ejército entraron a la capital del país
por Xochimilco (lo cual debe haber ocurrido en 1914). Mal rato pasó aquel viejo
trabajador pues sin mediar ninguna justificación, uno de ellos le soltó un
culatazo. Repuesto, o medio repuesto un rato más tarde nos dice que se vio
rodeado de otros tantos, quienes prácticamente aplicaron juicio sumario,
acusándolo, primero de “carranclan”, luego de espía y por “ultrajes” al general
Zapata.
“Angustia” se llama el poema que Pascual M.
González entregó a la redacción de LUX,
la cual tuvo a bien integrarlo en este número. Y ya metidos en la sección de
literatura, encontramos ni más ni menos que la firma de Vicente Blasco Ibáñez
de quien fue incluida “La Rabia”, cuyo texto daba perfectamente para
justificarlo como “Una Novela Mensual”. Más adelante, también encontramos,
ahora en forma d “Cuentos de Buen Humor” y escrito por Gabriel de Leautrec “La
Botella perdida”.
Por su parte, en la Sección Deportiva, “Don
Silencio” nos pone al tanto de las actividades más recientes, destacando en
forma notoria la de todos aquellos juegos de base ball celebrados, fundamentalmente
en el Parque Delta, de la Piedad, enfatizando lo que ocurrió en el juego que, a
beneficio del Tribunal de Menores, se celebró en los primeros días del mes de
junio, contándose con el privilegio de la asistencia de la Excma. Sra. Carmen
García de Portes Gil.
Las muy recientes y desagradables
declaraciones del candidato republicano a la presidencia de la república en
Estados Unidos de Norteamérica, el innombrable señor Donald Trump, y que
denostan a los mexicanos, tendrían en otro texto que se publica en el número de
LUX que se reseña, un claro
antecedente del trato o, más bien maltrato que desde hace poco más de 80 años
ya recibían nuestros compatriotas, muchos de ellos obligados a emigrar a los
Estados Unidos, con objeto de encontrar un ingreso que aquí no pudieron
obtener. La nota a que hago alusión es tan interesante, que conviene
reproducirla facsimilarmente, como sigue:
¿Recuerdan ustedes la petición que, con
motivo de la construcción del Teatro Nacional suscitó aquella colecta?
Pues aquí tienen el resultado de lo que reunió
y entregó a la vez la representación del S.M.E. en aquella ocasión:
“Informaciones Sociales” podría confundirse
con las notas surgidas de los eventos organizados con motivos y razones
extrasindicales, pero suficientes para encontrar cobertura en la propia
revista. Tal no es el caso, por ahora, y en esta sección se difundieron tres
asuntos de notable importancia. A saber: sobre “La Internacional de Amsterdam y
el movimiento obrero americano”, de “La cuestión social después de la guerra” y
“En favor del desarme”.
“Como se llega a Estrella de cine”, es una
entrevista realizada a Sam Goldwyn, famoso empresario de cine de aquella época,
quien destaca las siete cualidades necesarias para garantizar convertirse en un
actor de fama:
1.-Personalidad.
2.-Disposición
para el trabajo.
3.-Imaginación.
4.-Inteligencia
y sentido de la jovialidad.
5.-Juventud.
6.-Modestia.
7.-Buen
color y distinción.
Si
usted cumple con estos requisitos, favor de remitirse con este “cazador de
estrellas”.
Número este, sin demasiado contenido de esencia
sindical, quizá porque junio fue en ese año un mes que reflejó estabilidad, lo
cual puede apreciarse bien a las claras precisamente por el hecho de que los
temas abordados no contaron con ese sello peculiar que ya caracterizaba a la
revista, pero sobre todo de aquello concerniente con el ideario que ya se
trazaba para consolidar al Sindicato Mexicano de Electricistas.
Cerraba este ejemplar, con una fotografía
que ustedes verán a continuación:
He aquí a la célebre Lupe Vélez.
