HOY, ESTE BLOG ALCANZA LAS MIL ENTREGAS, 1000.

EDITORIAL.

POR: JOSÉ FRANCISCO COELLO UGALDE.

   Tengo enorme gusto en compartir con todos los “navegantes”, visitantes y demás lectores que, por una u otra razón, han podido acercarse a “Luz y Fuerza de la memoria histórica”. Hoy, 21 de marzo de 2017, el blog que un día se puso en marcha, justo el 27 de enero de 2013, alcanza esta primera etapa, que es la de compartir 1000 diversos materiales, entregas o textos en los que tanto Luz y Fuerza del Centro como el propio Sindicato Mexicano de Electricistas son temas centrales de divulgación. Como integrante de ambas comunidades y que lo fui desde 1987 (en Personal, Construcción y luego en Archivo y Correspondencia), agradezco infinitamente ese conocimiento y experiencia laboral que pude acumular durante poco más de 22 años, y donde supe del enorme valor de ambas instituciones. Entre otras razones, por el hecho de compartir con muchos compañeros de quienes aprendí infinidad de situaciones relacionadas con el trabajo, con la responsabilidad, pero sobre todo por el hecho de que Luz y Fuerza era la empresa a la cual nos habíamos contratado, y el Mexicano de Electricistas, Sindicato que iba a encargarse de responder a todos aquellos aspectos relacionados con derechos y obligaciones laborales.

   Tras el duro golpe de octubre de 2009, una lamentable situación tuvimos que vivirla poco más de 44 mil trabajadores: el estado nos había despojado de nuestra fuente de trabajo. Recuperarla en cualquier sentido fue en vano, para muchos. Y entre las diversas opciones, fuimos encontrando alternativas, respetables todas ellas. Los jubilados, por un lado, los liquidados por otro. La “Resistencia” que también fue un componente notable, notorio, que se hizo ver y nunca callar ante sus reclamos… Y en fin, todos quienes formamos parte de la comunidad, nos solidarizamos, pero también –y eso no está incluido en las consecuencias-, nos forzaron a una ruptura de la comunidad hasta llegar al punto de lo que considero como una pulverización de la misma.

Imagen tomada del portal de internet: http://www.sme.org.mx/

   Se mantuvieron incluso entre compañeros muy cercanos, distancias contundentes, y esa desconfianza, ese desatino que provocó aquel factor que incentivó la noche del 10 de octubre de 2009 tras el anuncio con el cual nos decían ¡¡¡esto se acabó!!!

   Surgieron las diferencias, los pros y contra, tan respetables unos como los otros. Sin embargo, era necesaria la reflexión, tanto de ese presente inasible como inestable que encaminaba todo a un futuro todavía más misterioso. Y ante aquellos escenarios, en lo particular me preguntaba sobre todo aquel pasado que integró la historia de ambas instituciones, para lo cual fue necesario entregarse a un esfuerzo que ha significado, en un primer balance, benéfico, satisfactorio. Se han rescatado buena parte de documentos, sobre todo en labores de digitalización, y de ello debo agradecer el apoyo de diversos camaradas que han sido tan generosos en facilitar lo que hasta hoy conservan. Unos más, otros menos. En algunos casos un documento, una fotografía, algo que evidencie lo que para cada quien ha significado LyFC y SME.

   Así que, en buena medida, “Luz y Fuerza de la memoria histórica” se debe a ese gesto, el que ha permitido alcanzar sus mil entregas, teniendo muy claro que dicha labor continuará en la medida de que se mantenga el principio de un rescate legítimo, mientras no existan condiciones que lo impidan. Conviene hacer justicia para que Luz y Fuerza del Centro, así como el Sindicato Mexicano de Electricistas se conserven en la memoria de este país, como dos grandes instituciones que, desde sus orígenes -1903 y 1914 respectivamente-, tuvieron entre sus grandes compromisos la producción, generación, transmisión, distribución y comercialización de la energía eléctrica, lo cual no es poca cosa.

Gracias por su confianza.