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viernes, 7 de marzo de 2014

LOS TRABAJADORES DE LA COMPAÑÍA DE LUZ y FUERZA MOTRIZ, S.A. y sus SUBSIDIARIAS Y SU RESPUESTA AL TEMBLOR DE JULIO DE 1957. (1 de 2).

PERFILES DE LUZ, O GALERÍA DE PERSONAJES. RESEÑAS PUBLICADAS EN EL BLOG: LUZ y FUERZA DE LA MEMORIA HISTÓRICA.

POR: JOSÉ FRANCISCO COELLO UGALDE.

I

   A raíz del temblor del 28 de julio de 1957, el “Temblor del Ángel”, buen número de cuadrillas de diversas gerencias, atendieron las emergencias que se presentaron, con motivo de aquel famoso temblor de magnitud 7.7, cuyo saldo hasta ahora conocido fue de 700 muertos y 2500 heridos, trajo entre otras consecuencias el daño a la infraestructura eléctrica. Por tal motivo, se giraron las instrucciones de rigor, y fue de ese modo como los trabajadores de la empresa atendieron aquellas fallas, mismas que quedaron controladas en breve tiempo, como veremos más adelante.
   Como es sabido, el domingo 28 de julio, la ciudad de México fue sacudida por un violento sismo, tal vez el de mayor intensidad en los últimos tres lustros (en aquel entonces), que causó derrumbes, con el consiguiente saldo de muertos y heridos, así como pérdidas materiales de importancia.
   Posiblemente entre los servicios públicos que más daños sufrieron se encuentran los que esta Compañía proporciona, ya que el 50% de los alimentadores de distribución quedaron fuera de servicio como consecuencia del temblor.
   Esta Empresa gracias a su organización y a la cooperación del personal de turno, al de emergencia y a los trabajadores que voluntariamente se presentaron a colaborar, pudo contar con suficientes elementos para lograr reparar en su totalidad y en tiempo record de 48 horas, los daños registrados en nuestras ciudades principalmente en el sistema de distribución aérea en zonas residenciales.
   La movilización de personal en esta emergencia, se inició minutos después de la interrupción del servicio eléctrico (el temblor se registró a las 2:44 de la madrugada), dándose preferencia a las líneas primarias y a las de alimentación a hospitales, estaciones de radio, televisión y prensa.
   Afortunadamente, las 19 plantas de generación de esta Empresa y las líneas de transmisión de alto voltaje, no resintieron daños de importancia. Tampoco sufrieron daños los cables de distribución subterráneos instalados en la zona central de la ciudad.
   La lección de unidad en el infortunio; el bello y conmovedor gesto de solidaridad humana, fue un gran ejemplo de civismo y disciplina de nuestro personal, ya que con su esfuerzo, al cooperar incansablemente hicieron posible devolver a nuestra metrópoli el fluido eléctrico, tan indispensable en nuestras tareas cotidianas.
   A continuación se reproduce la circular girada por la Gerencia, en la cual se hace público el agradecimiento a la leal cooperación y alto sentido de responsabilidad del personal de la Empresa en esta emergencia.

CIRCULAR N° 245

México, D.F., 29 de julio de 1957

A TODO EL PERSONAL:

   Con gran satisfacción he podido observar la valiosa y decidida colaboración del personal de las Compañías, en la reparación de los daños ocasionados por el fenómeno sísmico ocurrido ayer, así como el adelanto que hemos logrado para el restablecimiento de nuestro servicio público.
   Quiero expresar el agradecimiento de la Empresa y el mío propio por esta actitud y eficaz colaboración, especialmente a los trabajadores de los Departamento y Secciones de Operación (Ciudad y Sistema), Líneas Aéreas, Conexiones y Medidores, Reclamaciones y Quejas, Cables Subterráneos, Alumbrado Público, Garage y Transportes, Mecánico y Centrales Térmicas y al personal técnico que intervino en el caso y, en general, a todos los trabajadores y a los jubilados que ofrecieron sus servicios.
   Esperamos con las medidas que se han tomado, concluir las reparaciones a la brevedad posible y normalizar el servicio.

Atentamente

Gustave Maryssael
Presidente y Gerente General.




Revista LyF, Año IV, N° 37, del 1° de septiembre de 1957, p. 14-16.

Col. del autor.

CONTINUARÁ.

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