LUZ… A LOS POETAS.
FUERZA… A LOS POETAS.
SELECCIÓN HECHA POR:
JOSÉ FRANCISCO COELLO UGALDE.
¡OH!... VIDA FUGAZ
(Dedicado a los Compañeros Jubilados)
Ha puéstose en
lontananza el ocaso
muere otro día de
nuestra vida
y nace en la quietud
del regazo
la noche tibia,
obscura y perdida…
Pasó la alegre y
sutil PRIMAVERA
también se fue el
inquieto VERANO
y el OTOÑO cual
cogido de la mano
llega con el INVIERNO
a nuestra vera…
El reloj impasible en
su camino
sigue arrojando al
suelo la arena
y marcando un surco
en el Destino
con su guadaña
taciturna y serena…
Brilló ha tiempo
nuestra INFANCIA
pasó rauda nuestra
alegre JUVENTUD
y vino la MADUREZ con
su arrogancia
arrastrando tras sí a
la dócil SENECTUD…
Y hoy ya viejos y
hasta olvidados
sólo recordamos
nuestra fugaz existencia
y esperamos ya
deshechos y cansados
¡que la muerte nos
otorgue su clemencia!...
Imagen tomada el 15
de septiembre de 1954.[1]
12 de Octubre
Cual si fuere llamada
de atención
Invocada por un gran
coloso,
Llega a nuestra mente
la evocación
De aquel hecho
histórico y grandioso…
¡América! Vasta,
acogedora y hermosa
Tu suelo virgen fue
hollado
Por una planta
aventurara y anhelosa
Que buscaba el
paraíso sonado…
El secreto de tu
existencia ignorada
Fue mostrado al orbe
entero
Y tu riqueza por
siempre guardada,
Resurgió cual
inagotable venero…
Mas, aquel que tu
suelo descubrió
Cual partero que te
dio a luz,
Miserable, olvidado y
enfermo murió,
¡Como Jesucristo
acabó en la cruz!
En este “Día de la
Raza”, hoy llamado
Celebremos. ¡Oh,
América! tu nacimiento
¡Pero, elevemos por
aquel titán olvidado
En una oración
nuestro eterno agradecimiento!...
Miguel Ángel
Caballero T.
Depto.. Líneas
Aéreas.
Cred. N° 13875
Mercenario
Amante a la propina y
la censura
y doblando hacia el
suelo la rodilla;
vedle allí, con
aspecto que mancilla;
una dádiva implorando
con tristeza.
La recibe de su amo
con dulzura,
y ante él muy
frenético se humilla,
aiendo éste su
constante pesadilla
cuando llega a
negarle su ternura.
Mercenario servil: yo
tu bajeza
la maldigo, la odio y
la condeno,
cuando inclines,
infame, la cabeza,
por ganarte un tomín,
que es un veneno
para el hombre que
estima la grandeza,
pero no para ti, que
amas el cieno.
L. B. Herrera.
LUX. La revista de
los trabajadores, año
XXVIII 2ª época, 1° de octubre de 1956, N° 34, p. 8.
[1] Revista LyF, N° 1, del mes de octubre de 1954, p. 29. Al cumplir 50 años de
servicios la planta termoeléctrica de Nonoalco el pasado 15 de septiembre de
1954, y en virtud de coincidir esta fecha con la celebración de las fiestas
patrias, se llevó a cabo una sencilla y conmovedora ceremonia, en la que se
hizo entrega de una bandera a los trabajadores de dicha planta.
Correspondió al Sr. Ingeniero
José Tovar Arroyo entregar nuestra enseña patria a los más antiguos
trabajadores de la planta, y al Sr. Abraham López Lara, Secretario de Educación
y Propaganda del Sindicato Mexicano de Electricistas, agradecer obsequio tan
preciado.
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